En el mercado tenemos un amplio abanico de diferentes tipos de cerrojos, que podremos usar como segundas cerraduras, pero básicamente las podemos dividir entre los cerrojos convencionales que son accionadla con una llave, mediante acción mecánica, y los cerrojos electrónicos que son accionadlos mediante un mando.
Cerrojos electrónicos
Van instalados en la parte de la puerta que da al interior y desde el exterior no se ve nada en absoluto, el cerrojo es accionado con un mando o con el móvil y desplaza el cerrojo para anclarlo con el cerradero, que va instalado en el marco de la puerta. Se puede colocar a la altura deseada, incluso en ocasiones se instala en la parte superior de la puerta.
- Ventajas: desde el exterior al no verse nada es difícil de manipular, además su instalación es relativamente fácil ya que no habría que perforar la puerta. Además también podríamos abrir desde cualquier lugar a otra persona sin necesidad de darle llaves o claves.
- Desventajas: La estructura del cerrojo suele ser bastante más débil que la de un cerrojo convencional y en caso de apalancamiento suelen partirse antes. Además en cerrajeros Valladolid nos encontramos con multitud de llamadas de gente que les falla y no pueden entrar en sus casas y acuden a un cerrojo 24 horas en Valladolid, pero al no tener ningún elemento en el exterior no podemos reparar la avería y abrir la puerta, ya que la mayoría de las veces se desconoce el modelo y la marca exacta del mismo. El precio también es bastante elevado, nosotros como cerrajero creemos que por lo que cuesta un cerrojo electrónico de gama media tendríamos ya disponibles cerrojos convencionales de gama bastante alta. Tendremos que tener también dos métodos de apertura normalmente, uno para la cerradura principal mediante llave y otro para la electrónica mediante móvil o mando, algo que lo hace algo incómodo y que se tarde demasiado. Otra de las desventajas que ven nuestros cerrajeros es que la mayoría funcionan con pilas o baterías recargables, algo que aunque suelan tener sistemas de aviso de batería baja, suelen fallar en largos periodos de tiempo sin uso, incluso a veces no ten largos. Además este tipo de cerraduras son vulnerables a ataques o hackeos electrónicos.
Cerrojos convencionales
Van instalados mediante un agujero redondo que atraviesa la puerta para poder sacar el casquillo por el exterior, que es por donde metemos la llave y hacemos girar el mecanismo, y por la parte interior llevan un tranco para poder deslizarle mediante acción manual, mientras apretamos un botón.
- Ventajas: El precio como hemos dicho antes en una de ellas, ya que tenemos cerrojos de alta seguridad por unos 60 euros y alguno de gama premium con las máximas protecciones del mercado por menos de 200€, algo que para conseguir un buen cerrojo electrónico se quedaría corto. Otra ventaja es que es caso de avería, pérdida de llaves o similar un profesional de la cerrajería te lo podrá abrir sin perjudicar la puerta en absoluto. Además su estructura es muchísimo más robusta y en caso de apalancamiento desde el exterior soportan más palanca que sus hermanos los electrónicos. También podremos igualar las llaves de la cerradura principal para poder abrir las dos cerraduras con la misma llave. Al instalar un cerrojo de gama alta también conseguiremos disuadir a posibles atacantes, ya que muchas veces perderán el interés por el esfuerzo que les pueda llegar a suponer.
- Desventajas: si bien es cierto que desde el exterior son rápidamente localizables por los posibles intrusos ya que están a simple vista aunque puedan estar bien protegidos, además la instalación requiere más técnica y es necesario que lo instale un buen profesional de la cerrajería.
En cuanto a las marcas y modelos que nuestros cerrajeros instalan en mayor numero en Valladolid los podríamos dividir en dos tipos, de gama media-alta, que son cerrojos con buenas prestaciones de alta seguridad, como el Fav Uve RP80 o nuestro preferido el Lince 7930, ya que cuenta con ciertos detalles que valoramos mas, como por ejemplo una pestaña que al ponerla en modo “C” bloquea el cerrojo totalmente, imposibilitando cualquier manipulación desde el exterior. En cuanto a la gama alta, nuestros clientes suelen preferir el Sag con su variante de inserto de Kaba entro, sin duda una de las opciones de gama alta y a un muy buen precio.
Conclusión, nosotros como cerrajeros profesionales pensamos que actualmente la industria de la cerrajería no está lo suficientemente adelantada y quedan aún faltan algunos años para solventar ciertos problemas que nos dan este tipo de cerraduras electrónicas, si bien es cierto serán el futuro dentro de algunos años. Donde si pensamos en que la industria cerrajera está avanzada es en las medidas de protección que se emplean actualmente en la fabricación de las cerraduras o en este caso lo cerrojos, ya que se emplean materiales de máxima dureza y de alta calidad, llaves incopiables y por supuesto protección anti bumping, anti rotura y anti extracción, como por ejemplo los cerrojos Sag que llevan diferentes tipos de insertos, como los Kaba o los Keso.
Otro punto a aclarar es que algunos clientes nos solicitan la instalación de cerrojos tanto electrónicos como convencionales en PUERTAS ACORAZADAS, lo que nosotros desaconsejamos, ya que primeramente perderemos la garantía de nuestra puerta acorazada, además de las dificultades para asegurar un cerrojo en una puerta que lleva unos paneles muy finos de madera y ademas con bastante vacío entre este y la estructura de la puerta.
También hay unos cerrojos especialmente fabricados para puertas metálicas, en concreto las de TRASTERO, como por ejemplo el Lince 7930 TRAS que es uno de nuestros preferidos, ya que llevan protección anti-bumping, anti-taladro, es decir son de alta seguridad. Estos cerrojos a diferencia de otros se instalan mediante unos tornillos pasantes y ciegos en el exterior, que hacen que se sujete a la puerta de una manera excepcional, ya que si instaláramos un cerrojo normal con tornillería normal, no lograríamos asegurar bien el mismo, ya que las placas de metal de la puerta son sumamente finas, y si lo hiciéramos con remaches si bien es cierto que conseguiríamos asegurarlo mejor pero no soportaría la misma fuerza ante un apalancamiento.
